Bicis-mosquito: los vehículos no autorizados que siguen transitando libremente por las calles y ciclovías
Aunque se ha implementado un plan de fiscalización y las autoridades están haciendo esfuerzos para retirar de las calles las bicicletas que han sido modificadas con motores de combustión, estas siguen circulando. Esto se debe en parte a que son fáciles de conseguir y más económicas, lo que las convierte en la “herramienta de trabajo” preferida por muchos repartidores de delivery.
Las bicis-mosquito hacen saber su presencia con un ruido estruendoso que se asemeja al zumbido de un mosquito, pero a un nivel de decibelios excesivo. Además, dejan tras de sí una emisión de humo invisible con un aroma fuerte y molesto que puede irritar las membranas mucosas de aquellos que lo inhalan. Estas bicicletas modificadas funcionan con un motor de combustión añadido, lo que les facilita el pedaleo y les permite recorrer grandes distancias a un costo bajo.
Pero su existencia representa un dolor de cabeza para los ciclistas y las autoridades. “Es un problema severo, que tiene ribetes de seguridad, contaminación y salud que no podemos permitir”, enfatizó el ministro de Transportes y Telecomunicaciones (MTT), Juan Carlos Muñoz, al anunciar que es “un vehículo que está totalmente fuera de norma, que no puede circular”.
Aunque el ministerio encargado había prometido llevar a cabo una “fiscalización sistemática” desde diciembre de 2022 para eliminarlas de las calles, en este primer trimestre del 2023 todavía se pueden oír sus motores característicos y se las ve compartiendo la vía exclusiva para bicicletas convencionales, infringiendo las normas de convivencia vial.
El peligro que representa una bici-mosquito en la vía pública
De acuerdo con información proporcionada por el MTT, las bicis-mosquito de doble propulsión emiten entre 30 y 50 veces más contaminación que un vehículo particular con motor de combustión. Un estudio llevado a cabo por la Universidad Católica reveló que la concentración de hidrocarburos y dióxido de carbono es 100 veces mayor que la producida por un automóvil.
El humo que emiten las bicis-mosquito al desplazarse es dióxido de carbono, considerado por la medicina como un “asesino silencioso e invisible” que resulta extremadamente perjudicial para la salud de aquellos expuestos a inhalación. En cuanto al ruido, estas bicicletas sobrepasan el doble de la norma permitida para los vehículos automotores.
“A pesar de ser motores chicos, tienen concentración de gases nocivos para la salud (…) Son motores rústicos, no tienen catalizador, mezclan bencina con aceite”, explicó Ricardo Hurtubia, académico de Ingeniería de Transportes UC e Investigador del Cedeus, a Radio Biobío.
Además de los riesgos ya mencionados, hay que tener en cuenta los asociados a la velocidad: una bicicleta modificada con motor de combustión puede alcanzar con facilidad los 50 kilómetros por hora, y en grupos de Facebook de comunidades de “moskiteros”, como se autodenominan, se venden motores que pueden alcanzar hasta los 66 kilómetros por hora.
Desde la Municipalidad de Providencia, aclaran que “los ciclos son los únicos que pueden circular por las ciclovías, por lo que las denominadas bicicletas ‘mosquito’ o scooters que sobrepasen los 25 km/h no pueden hacerlo”.
En comparación con las bicis-mosquito, una bicicleta convencional tiene una velocidad promedio de 21 kilómetros por hora y alcanza un máximo de 40, por lo que se ve fácilmente superada por estos vehículos, especialmente en las ciclovías, donde los ciclistas se ven obligados a inhalar los contaminantes que emiten mientras aceleran.
“Por la velocidad que alcanzan estas bici-mosquito, uno duda de la capacidad que tengan para poder frenar, porque estas bicicletas no tienen un sistema de frenado que sea demasiado eficaz. Usan frenos de pastillas, que se desgastan rápidamente por la misma velocidad a la que transitan”, explica al diario La Tercera Iván Antonucci, ciclista y creador de contenidos.
“No solo son un peligro para los ciclos que transitan en ciclovías o para los autos en las calles, sino también para los peatones. Usan la vía pública como se les antoja”, agrega el joven que se viralizó en TikTok por criticar la falta de fiscalización de este tipo de vehículos.
Fuente: La Tercera
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